miércoles, 6 de junio de 2012

04.02.10 Pero no estan hartos de riqueza - Simon Hidalgo




¿PERO NO ESTÁN HARTOS DE RIQUEZA?



Una vez más se me revuelve el estómago cuando leo esta mañana la noticia de que “La Iglesia inmatricula un despoblado de Lerga a espaldas de los vecinos”. Ahora se trata del despoblado de Abaiz. Pero señores jerarcas de la Iglesia Oficial de Navarra ¿No están hartos de riqueza? ¿Qué finalidad tiene atesorar tantos bienes materiales? ¿Dónde está el desprendimiento y la pobreza evangélica que predican?

La verdad es que dan ganas, y es algo que me ronda por la cabeza desde hace tiempo y a algún amigo se lo he comentado, de pasarme por  las oficinas del arzobispado para borrarme de la Iglesia Católica, porque el ejemplo que me dan sus dirigentes es cada vez más negativo en este punto referido al afán desmedido por las riquezas. Lo pienso desde mi altura de los 62 años que tengo y desde mi formación fuertemente creyente en Jesús. Lo que me detiene son sus mismas palabras cuando hablaba de los Escribas y los Fariseos. “Haced lo que os digan, pero no les imitéis”. Pero ¿no sería más convincente el hacer lo que dicen porque también lo hacen? ¿No es cierto que el ejemplo arrastra?

En este terreno claramente la Iglesia Oficial, desde mi manera de ver, no da buen ejemplo, aún en el caso de que ciertamente fueran suyas todas las propiedades que ha inmatriculado. ¿Para qué las quiere? ¿Para qué tanto tesoro? ¿Para qué tanto boato? ¿Para qué?... ¡y encima mendiga lastimera que el Gobierno les arregle “sus” catedrales, claustros, iglesias parroquiales y ermitas, porque es pobre! ¡Qué negocio tan grande se ha montado!

¿Se han preguntado por qué están las iglesias casi vacías? ¿Se han preguntado por qué la mayor parte de la juventud pasa de la Iglesia? ¿No será en gran parte porque han descubierto su farsa? ¿No será porque predican una cosa y hacen otra?

Yo, para empezar y antes de dar el paso siguiente de borrarme de la Iglesia Católica, en mi próxima declaración de hacienda NO marcaré la casilla de la Iglesia. Postura que mantendré mientras no haga, con todo lo que tiene, lo que nos dice a todos el evangelio: “Vende lo que tienes y dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en los cielos”,porque señores de la jerarquía católica de Navarra ¿no están hartos de atesorar riqueza? ¿Es su postura seguir los pasos del Crucificado?